13 de septiembre de 2015

La tarea del ahijado

Sin pensarlo me he levantado relativamente temprano, eran las 9 de la mañana cuando ya me encontraba organizando las cosas que le llevaría a mamá, aunque no son muchas pero de alguna manera debo de hacer espacio para guardar las pocas cosas que quedan ya arriba.

Entre esas cosas he sacado el canasto que teníamos guardado en el ropero con ropa tejida, he sentido horrible cuando saque el suéter que te tejí hace mucho, pero el problema no fue el suéter, más bien que aún conservaba la forma en la que sueles doblar la ropa Alex, darme cuenta de que sigues presente en mi “vida” de una forma u otra.

Antes de ir con mamá he pasado a la casa del ahijado, ayer me ha dicho que me acompañaba con mamá y luego requiere ayuda con una tarea que le han dejado y no puede avanzar, creo es más por la Tablet que otra cosa.

Llegamos con mamá y ya nos esperaba con unos ricos tacos dorados, yo solo he podido comer 3 pero el niño se ha comido 6, es curioso como en casa de mamá hasta pide más comida pero en su casa pocas veces lo veo repetir, en fin, seguramente es debido a que usan mucho picante y mi mamá no.

De ahí a hacer las compras, de nuevo hemos pasado por el puesto del señor Lalo pero ni rastros de las latas de café, ni hablar, tendré que abrir la última lata que me queda y chiquiteármela lo más que pueda.

He traído 3 rosas más a la casa, mamá ha comprado dos y yo una, más que nada para sustituir a las que ya se han podrido o muerto, es extraño pero por más que las procuro nada más no duran, quizá sea por la visita de los gatos que andan en las azoteas, con decirte que hasta han marcado una de las paredes en la casa, será que están buscando a “la Chavela”?

Por la tarde he descubierto que mis sospechas estaban en lo cierto, la aplicación que trataba de acezar el ahijado requería la entrada de un teclado numérico, eran sumas muy sencillas pero aún le cuestan trabajo al niño, todo iba bien hasta que le pedí que no cometiera errores o tendría que repetir el nivel, y su frustración creció más cuando el tiempo se redujo a 1 minuto para 40 operaciones, lo más que llegó a hacer fueron 33, aunque no sé si con errores o no.

Mientras él hacia los ejercicios me puse a lavar, subiendo a los cuartos me doy cuenta que por más cosas que baje, tire o regale no logro desocupar gran cosa, me frustra tanto esto Alex. También he visto la forma en la cual Andrea se despide del tipo que ha dejado su coche abajo, aunque me haga groserías pero de corazón deseo que ese chico sea el indicado para ella, aunque noté más sentimiento por parte de ella que de él, pero quien soy yo para criticar una relación Alex?, espero que le vaya mejor que con el otro chico.

Termino el día cuidando que los vecinos no se estacionen en la entrada, llevan ya una semana haciéndolo y comienza a ser molesto.

Alex… ven por mi… no puedo más… TE AMO.

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