Supuestamente había puesto la alarma del despertador para levantarme entre las 9 y 9:30 de la mañana y llegar temprano con mamá, pero el ruido de la puerta lo hizo, esta vez era Cecilia quien le abría la puerta a Andrea para sacar el coche, al mirar el reloj ya eran casi las 10 de la mañana.
Me he levantado rápido, me vestí y organice las cosas que le llevaría a mamá, aunque esta vez me tomé la medicina del poli antes de salir de casa, ha habido días en los cuales olvido el tiempo y como antes de que se cumplan los 30 minutos que debo dejar pasar para ingerir alimentos.
Y llegue rápido a su casa, ella ya me estaba esperando con un rico plato de papaya y luego me hizo unos tacos dorados “suaves” muy ricos, de ahí hemos ido a la pastelería La Suiza, hemos comprado pan para nosotras y las conchas para tu mamá, por supuesto he pagado con tu tarjeta Alex, he tenido una pequeña confusión al momento de pagar pues la señorita que atendía a mamá pensó que me había equivocado de tiquete pero le he explicado al cajero que me cobrara el de mamá y el mío juntos.
Sabes Alex, creo que volveré antes de lo pensado, hay una caja de macarrones que me llamaron mucho la atención y sé que mamá estará dispuesta a acompañarme por ella y de paso comprar pan.
De ahí hemos ido a comprar más cereal, supuestamente le han dicho a mamá que para el domingo ya tendrían más en el estante, pero no ha sido así, con decirte que hasta hemos preguntado a un encargado y fueron a verificar al almacén, han dicho que ya no había pero que no tardarían en surtir más mercancía, ni hablar Alex, mi idea de comprar más cajas se ha esfumado, lo bueno es que mamá me compro 5 cajas el viernes pasado.
Prácticamente es todo lo que he hecho con mamá, me he venido a la casa, no sin antes pasar con tu mamá y dejarle las conchas, me han contado lo que hicieron ayer. Yo pensando que habían dejado a tu mamá sola toda la tarde, pero se la han llevado con ellas, han ido al centro pero por la lluvia se han topado con bastante tráfico.
Mientras iba por el alcohol para tú mamá, pues me dijo que le duele un poco la pierna izquierda y el brazo derecho, el primero por una herida y el segundo por una mala inyección, me he topado con la “mudanza” de Victor, he de decirte que han cambiado su cama por una del mismo tamaño que la nuestra, a veces pienso que sigue las cosas que hiciste, que hicimos Alex, eso de casi vivir con su novia en casa de tu mamá y ni que decir de los viajes y los espectáculos que llegamos a ver, será esa su forma de acercarse a ti?
Por supuesto tu mamá estaba muy molesta por el hecho de que usaran su camioneta, me ha dicho que no le gusta que usen sus cosas y eso lo debería saber bien la esposa de él, pero dudo que lo sepa, en fin. Me parece comienzan ya los roses. También me ha confirmado la mudanza de Nancy, me pregunto quién vivirá ahora en esos cuartos, espero que no me pidan que me mude.
Ya en casa he organizado un poco la casa, sacudí algunas partes, barrí y trapeé, además de bajar algunas cosas de los cuartos de arriba, todo para cumplir con mis tiempos y dejar todo semivacío este mes, prácticamente solo he bajado algunas cajas de tus juguetes y tu consola para escuchar discos en acetato, comienzo a sentirme amontonada, pero no me queda de otra Alex, ya con el tiempo, si es que tengo, iré deshaciéndome de más cosas, por ahora es lo mejor que puedo hacer.
Por la tarde me ha pedido Perla acompañarla para visitar a tu mamá, ha sido ella quien sugirió que se pusiera éter en su herida pues lleva días que no le cicatriza, como han dicho tu mamá es buena para dar remedios pero se le olvidan al momento de aplicárselos a ella, afortunadamente aún tenían el frasco que compraron cuando operaron a su hermano, así que Cecilia le ha puesto en su herida, esperemos mañana amanezca mejor.
Un día largo y cansado Alex, espero poder conciliar el sueño y aguanta la presión del “aparato” que debo usar por unos 3 meses para corregir la separación en los dientes, pero duele bastante.
Alex… ven por mi… ya no quiero estar aquí… no tardes… TE AMO.
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