En el trabajo todo ha estado tranquilo Alex, he comenzado a programar pero me he topado con muchos problemas, los de siempre pero algunos me tienen desconcertada, en fin, espero poder solventarlos o de lo contrario hablar con alguien que sepa bien del tema.
En la oficina hemos estado casi todos, aunque antes de la comida se ha ido Pedro, supuestamente por una reunión, además Vic se la ha pasado en el taller el resto de la tarde, anda viendo no sé qué tantas cosas, ya sabes cómo es él y sus misterios.
Por la tarde, de regreso a casa, me he topado con la señora María y hemos quedado en seguir de la misma forma, es decir, que vaya una semana si y otra no a hacer la limpieza, por supuesto le he argumentado que es mejor así para que también ella descanse un poco y así poder alternar la limpieza entre Nancy y yo.
A lo que me respondió que seguramente Nancy ya no tarda en irse de la casa de tu mamá, pues hace unos 20 días o más que fue a limpiar y se dio cuenta que casi ya no había muebles, lo más importante ya no estaba, la cama y la mesita de centro. Así que en breve dejará de tener ese domicilio.
La noticia me ha caído de sorpresa Alex, nunca imagine que Nancy dejará de tener ese lugar, aunque viéndolo bien ella es muy organizada con su dinero y seguramente la renta es un gasto innecesario para ella. Por lo que pienso que de nuevo tu mamá saldrá con que no tiene dinero, y ahora más por lo de su tratamiento.
Después he visto a Cecilia en la Cacho-Tienda y nos hemos puesto a charlar, además de que le contamos lo que había pasado el domingo pasado con su hijo y una grúa, es extraño que no supiera del suceso, pero seguramente están pasando muchas cosas en esa casa que muy pocos podemos entender, por supuesto me incluyo Alex.
He vuelto a casa a comer y al terminar me he puesto a lavar los trastes y dejar un poco limpio, hasta me animé a preparar agua de pepino, aunque al preguntarle a Margarita como la preparaba su mamá he tenido que salir de casa y pedirle 3 limones a la comadre, ahí me encontré a una de tus primas con las Chávez, curioso pero me ha pedido el número de mi telefonito Alex. Quizá ya me están incluyendo en su círculo de “comadres”.
He vuelto a casa, le puse el limón y la azúcar al agua y le he quitado un poco de fibra, he dejado todo en el refrigerador, espero que mañana tenga un buen sabor.
Te extraño tanto Alex, seguro te reirías de mi agua de pepino…
Alex… ven por mí… TE AMO.
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