El refrigerador

El día comenzó bastante ajetreado, mamá no paraba de llamarme para decirme que había podido comunicarse a la tienda, que solíamos ir, y pudo encontrar el refrigerador que quería, solo que el encargado le ha dicho que se apresurara a ir por él o de lo contrario le tendría que cambiar el precio, solo había uno en existencia.

Así que no me quedo más que ir a la tienda, aun con las lagrimas a flor de piel, fui y lo compre para dejarlo apartado en lo que encontrábamos mudanza para llevarlo a casa de mi madre.

Le pregunté a Vic si me podía ayudar con eso, estaba bastante apurado y hasta me hizo cerrar la puerta de su oficina para hablar del tema, me dijo que si pero si nos detenían tendría que pagar la multa, podía llevarme al Papote y Silver para eso, pero era un volado lo de la multa, lo que me hizo pensarla ya que Don Jorge me dijo que ha llegado a pagar más de 1000 pesos Alex, preferí decirle que no y agradecí el ofrecimiento.

Pero eso de la mudanza ha sido un viacrucis Alex, Raúl, si vecino, no quiso llevarlo argumentando que ya no se dedicaba a eso, luego ella ha ido a buscar alguien que pudiera ayudarnos, afortunadamente se me prendió el foco y le pregunte a Rafita, el me recomendó con un señor que si se encarga de eso Alex. Solo que es un poco enojón, quería que ya estuviera ahí con el refrigerador.

Fuimos a la tienda y esperamos alrededor de 10 minutos, por supuesto el señor se molestó, luego lo llevamos a casa de mi madre, pero como no cabía el camión lo bajaron rápidamente, baje con ellos y ayude a meterlo, me desespero mucho que mamá no hubiera preparado todo, con eso de que no quiere hacer fuerza, así que en un dos por tres moví muebles, baje su microondas y sacamos el viejo para meter el nuevo, por supuesto hubo un momento en el que le grite a mamá y ella trato de chantajearme.

Ha dicho: Hija, ni el señor me habla así, yo le dije: Pero yo sí, salte. Con su cara y todo pudimos meterlo, me dio el dinero para pagar y nos regresamos a la oficina, aunque no le correspondía me dieron un aventón para la oficina, por supuesto llegue bastante emocionada pero ella aun estaba con su chantaje a flor de piel, le colgué y solo hable con ella hasta la tarde y fue rápidamente.

Estaba feliz por haber hecho todo eso hoy Alex, pero no sé si ella lo aprecie, no tienes idea cuanto me ha costado estar en esa tienda y sinceramente no sé si ella lo llegue a apreciar. Según ella había limpiado a conciencia el refrigerador viejo, pero yo lo vi bastante sucio, ni hablar. Creo que algunas cosas de tu mamá se me están pegando.

Día lleno de emociones, sobre todo tristeza, solo por la noche he podido llorar las lagrimas que me trague, te extraño tanto Alex.

Alex… ven ya por mi… no tardes… TE AMO.