11 de abril de 2014

La limpieza en la oficina

Desde antes habíamos quedado de ayudar a las personas si nos era posible, recuerdas Alex?, así que hoy vino a la oficina la esposa del taxista que ayuda a mamá para hacer la limpieza, he tenido una mala sensación cuando me saludo pues no me dio una buena impresión, además de que su perfume hizo que comenzara a estornudar.

Últimamente me he vuelto muy sensible a los aromas Alex, quizá sea por la alergia o la medicina que estoy tomando, pero bueno, Vic bajo a hablar con ella y le mostro el lugar, no sé que tanto le dijo pues estábamos en una mini presentación con Magos, hablando más que nada sobre los nuevos productos y donde podíamos bajar la información, por supuesto todo de la página de Honeywell.

Lo curioso ha sido que apenas dando la 1 de la tarde la señora dijo que ya había terminado, todos en el taller nos quedamos viendo unos a los otros pues coincidimos en que había pasado muy poco tiempo, por supuesto la cara de Vic lo dijo todo, el me había dicho que se le hacía elevado el costo de la limpieza, pero que dependería de cómo la realizaba.

Al final, cuando se ha ido subimos a las oficinas para ver su trabajo, lo hizo bien pero no tanto como Vic hubiera querido, creo que solo la llamará en caso de ser muy necesario de lo contrario el lo haría y se estaría ahorrando 300 pesos, veremos qué pasa.

Aunque sinceramente dudo que la vuelva a llamar, sabes Alex, yo tampoco lo haría. Dudo completamente que solicitara sus servicios para la casa, con la señora Maria tengo más que suficiente, además con eso de que no viene todas las semanas.

Para mi sorpresa, cuando hemos ido a comer, Magos me invito la torta, yo traía dinero pero no cambio, agradecí el gesto. Parece que ahora si comenzarán a exigirme más en la oficina, no sé si eso sea bueno o malo Alex. Sinceramente tengo tanto miedo, me haces mucha falta, cosas como estas no deberían estar sucediendo y mucho menos sintiendo de estar juntos.

Por la tarde me he quedado de ver con Jessy para que me de las cosas que encargamos, nos hemos visto en una parada del metro, medio revise las cosas y me vine a casa, bastante triste Alex, como siempre trato de comprar algunas cosas para dos personas, aunque termine usándolas solo yo.

He sentido feo cuando abrí los perfumes en la casa, eres tu quien siempre me los escoge, al final los escondo en un cajón, por el momento no quiero saber nada de ellos.

Te extraño tanto.

Alex… ven ya por mi… no tardes… TE AMO.

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