14 de abril de 2014

Esperando al doctor

Nos hemos levantado temprano para ser las primeras que atienda el doctor, llegamos antes de las 8 de la mañana, para nuestra mala suerte ya había mucha gente esperando, así que tuvimos que hacer lo mismo, como a las 9.30 de la mañana le pregunte a una estudiante si iba a venir el doctor, su respuesta fue: Está en quirófano.

Así nos trajeron 2 horas, de ahí no la sacabas y para colmo la enfermera menciono que lo mejor era volver mañana a la misma hora, pero la terquedad de mamá nos hizo quedar, seguramente habré puesto una carota pero me senté lejos de mamá para que no se diera cuenta.

Lo que me molesto es que aun así podía escucharla, y como siempre se estaba haciendo la víctima, para despejarme un poco fui a control y pregunté si el doctor estaba en el hospital, me hicieron ir a otro lado y luego me aseguraron que estaña en quirófano, así que a esperar.

Mientras esperábamos aproveché para ir a comprar la medicina que me faltaba de la receta, de nuevo comienzo a sentirme mal Alex, creo que ya no es más una simple alergia como les he venido diciendo desde hace tiempo, pero bueno. Fui a la farmacia de similares pero la señorita en lugar de devolverme el boucher para el cliente me dio el que ellos se deben de quedar, no me di cuenta del erro hasta estar con mamá, a ella le compre más gasas para su parche.

No sé cuánto tiempo estuvimos ahí, pero mientras la pila de mi teléfono se agotaba por estar leyendo levanté la vista y vi al doctor, mi primer movimiento ha sido correr hacia él y preguntarle si podía atender a mamá, me dijo que si y que la pasara inmediatamente.

Afortunadamente estaba de muy buen humor, le he regalado dos de las paletas que me regalaron en la farmacia, revisó a mamá, me dijo que ya no veía nada de infección, como la otra vez que me puso como lazo de cochino, me hizo algunas aclaraciones con respecto a su medicamento y quedamos de vernos hasta el 9 de mayo.

El inconveniente es que deberá llevar aun el parche en el ojo pues dice que lo está cuidando y no quiere que ninguna infección o algo interfiera con la recuperación, prohibido tener plantas o perros en casa, así que le hemos pedido al taxista que siempre la lleva y trae nos cuide al Falcon, afortunadamente accedió.

Ya más tranquilas hemos vuelto a casa, por supuesto mamá medio molesta pues le dejaron el parche y ya se encuentra muy desesperada ya que con el otro ojo no ve bien, pero ni hablar Alex, son órdenes del doctor.

Me he venido al trabajo mientras el taxista se lleva a mamá a su casa, creo que así estaremos mejor las dos. Como dice el dicho Alex: “cada chango a su mecate”.

Por supuesto le he estado hablando continuamente, según ella las vecinas le van a ayudar para limpiarle el ojo y ponerle las gotas, pero aun así, estando en su casa, no deja de ser un poco molesta, me llama constantemente y cuando le digo: Que paso?, me responde: “Nada”.

Volver a casa sola es triste Alex, me siento bastante mal, creo que esto de su operación es mucho para mí, dudo que por otra persona haga lo mismo.

Alex… duele mucho estar sin ti… ven ya por mi… no tardes… aquí espero… pero ven ya… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario