Hoy ha estado tranquilo el día, les di mi primer clase de computación al Papote y el Hermanote, tratando de hacer una pequeña analogía con una casa, afortunadamente me han entendido, o eso me han hecho entender. Pero como he podido respondí sus preguntas de la mejor manera, sin hablar tan técnicamente. La clase ha durado unas dos horas aproximadamente, otro día continuaré con eso.
Pero al menos cuando vi a Vic se lo dije y me comento que continuara así, ya es tiempo de retomar algunos planes, eso fue lo que me dio a entender.
Al llegar a casa paro a ver a tu mamá, como todos los días, le llevo el dinero a las Chaves, pero como no había casi nadie ya que la comadre está en el hospital con el niño, Eliza se había ido a trabajar y Blanca estaba atendiendo al Cesarín, me vine a la casa para comer un poco, aunque lo hice rápido pues volví para ayudarle con el rosario.
Hoy se han preparado mini tortitas, del pan que sobro ayer, así que ayude a Cecilia a prepararlas, para mi sorpresa me encontré con tu tía Antonia en casa de tu mamá, les había llevado algunas cajas de galletas a las Chaves y le presumió a tu mamá un yogurt ara beber, según ella la próxima vez que esté por ahí llevara uno para tu hermana y de paso uno para mí, como no queriendo la cosa me ha incluido.
Mientras terminábamos de preparar las tortitas se pusieron a chismear, para no meterme en camisa de 11 varas preferí quedarme callada, solo que al irnos ya a casa de las Chaves sucedió algo que me hizo sentir sumamente triste.
Tu mamá y Cecilia fueron a sus casas por unos suéteres, el clima ha estado bastante frío por la noche, y tu tía se fue al baño en la casa de la abuela, me quede esperándolas en el patio pero al estarlas esperando ha sido como un dejavu, escuchar como alguien estaba en el baño, yo esperando y tu mamá en su casa, por un momento llegue a pensar en las tantas veces que hice lo mismo, pero esas veces te esperaba a ti para venirnos a la casa, cuando escuche que abrían la puerta del baño, con los restos del corazón en la mano, esperaba verte, pero he sentido muy feo descubrir que era tu tía Antonia quien salía. Estuve a punto de decir: “Te lavaste las manos Alex?”. Pero no saliste tú, ella salió y se secó las manos en sus enaguas.
Casi me suelto a llorar, esta vez tuve que trabarme las lagrimas y secarlas inmediatamente, no negaré que he llorado un poco, pero no se han dado cuenta Alex. Y ha sido bueno pues me evito estar dando explicaciones absurdas.
En el rosario me la pase leyendo en el telefonito, luego repartir los bocadillos y me vine a casa temprano. No tenía ganas de quedarme más tiempo, me comí una tortita, le di 2 a Fernando para que le diera una a Xochitl, todos alcanzamos excepto Janete, Juan y Cecilia. Aunque tu primo parece que se ha molestado, pero todos los de su familia han comido.
Me siento muy cansada pero debo hacer algunos deberes para mañana.
Te extraño tanto.
Alex… ven ya por mi… no tardes… te lo ruego… ven ya por mi… TE AMO.
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