27 de septiembre de 2013

Las flores del ahijado

Cuando el despertador comenzó a sonar casi se me cae entre las manos, pero aun así me levante, mas con ganas de quedarme en casa que nada, afortunadamente antes de meterme a bañar revise mi celular y encontré un mensaje de Vic diciéndome que nadie estaría en la oficina hoy, que nos veíamos hasta el lunes.

Creo que debo comenzar a revisar sus mensajes más seguidos, aunque pude volver a dormir preferí no hacerlo, me pase la mañana mirando televisión y revisando algunas cuentas, todo en orden Alex, al menos por ese lado.

He ido al Cenlex, supuestamente hoy nos aplicarían un examen que lo tan pasado al lunes, veremos cómo me va Alex, necesito sacar buenas notas para pasar el nivel, Mauricio continuo fregándome con mi baja nota, aunque el también ha sacado malas notas y si hago olas seguramente por sus faltas no pasará el nivel, pero no soy tan castroza como él.

Por la tarde, cuando fui por tu mamá para irnos a las flores trato de regañarme por no tapar al coquito, pero me excuse de ella y las esperé afuera, aproveché para ir por el ahijado Alex, pensando que con él se abstendría de hacerlo, y casi lo logro aunque si se molestó mucho pero casi de inmediato lo olvido.

Y nos pusimos en camino para Jamaica, el niño participó un poco en la charla, más que nada respondiendo las preguntas de Cecilia, como a qué hora se levanta, cuando se baña, etc.

Y ya en Jamaica el niño me agarro de la mano y nos fuimos a comprar flores, no llevaba mucho dinero y comenzamos a comprar las flores, hoy no he encontrado flores lindas pero compre algunas que seguramente me criticará tu mamá, pero al menos son colores vivos Alex, como te gustan.

Lo de pedir cualquier cosa no se le quita al niño, pero le puse un límite sin que se diera cuenta, al final ha vuelto con 3 ramos de flores, uno para su mamá, para su tía Blanca y el otro para él, quedo tan contento que amenazó con volver a Jamaica la próxima semana Alex, aunque esta vez le he dicho que le pida dinero a su mamá ya que insistía mucho en comprar girasoles, que por supuesto eran un poco caros.

Después de dejarlo en su casa volví a la nuestra Alex, es horrible encontrar una casa sola, triste y vacía. Te extraño tanto.

Alex... por favor ven ya por mi… duele mucho… te lo suplico… no tardes…. TE AMO.

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