Tal parecía que sería un domingo como todos Alex, levantarme temprano, ir con tu mamá y hermana a ponerte flores, ir a comprar fruta a la Quiroga, ir con mi madre y volver a casa para encerrarme en mis recuerdos.
Como en días pasados he perdido el dije que colgaba de mi arracada derecha, mamá y yo fuimos a una tienda departamental con la esperanza de encontrar algunos y buscar uno que me agrade, todo iba bien, caminamos bastante.
Con decirte que hemos pasado por aquellas escuelas en las que yo curse el kínder y la primaria, muchos recuerdos vinieron a mi mente, sobre todo aquellos en los cuales te enseñaba dichos lugares y platique algunas anécdotas en cada uno de ellos, que si el niño que me levanto la falda en el kínder o la mano de Ángela Peralta que está guardada en la dirección de la escuela y una vez la encontré cuando limpiaba ese armario por haberme portado mal.
Llegamos y sin pensarlo me fui directo a la zona de DVD’s, pensando que quizá encontraría una serie que hace años me regalaste Alex, pero no la encontré, vi algunas que seguramente habrían llamado tu atención, algunas han llamado la mía, pero eta vez desistí en comprarlas.
Llegamos a la joyería, muchas piezas ordenadas de manera aleatoria pero ninguna que me llamara la atención hasta que vi esos pequeños aretes de hadas, de nuevo los recuerdos me invadieron y estuve a punto de llorar y salir corriendo del lugar, me contuve lo mejor que pude Alex, finalmente no encontré nada que me gustara mucho menos vendían dijes pequeñitos. Ni hablar, tendré que visitar alguna joyería.
Y justo cuando íbamos a salir pase por la sección de libros, me he entretenido bastante Alex, encontré la colección de los libros que dimos compraríamos, la colección que yo estaba buscando y una más que vi en otra tienda, la cual quería comprar.
Tres colecciones de libros que he estado buscando y sin pensarlo las he comprado, por supuesto haciendo memoria si llevaba el dinero suficiente, mamá se ofreció a prestarme dinero pero afortunadamente me ha alcanzado, hasta descuento en un libro me han hecho.
Y volvimos a casa, seguramente mamá no entendió lo que me ha causado compras esos libros, para ella ha sido una cantidad grande, para mi… me da igual, como todas las cosas Alex.
Y volví a casa temprano, pase a avisarle a tu mamá que ya estaba en casa y me vine, me ha dado una tremenda tristeza, como si comprando esos libros llenara el enorme vacío de no tenerte, por supuesto los leeré Alex, por ti… por mí… por los dos.
La tarde ha pasado rápido, estoy terminando de leer un libro, que al final me está resultando bastante aburrido, sobre todo porque es una literatura para adolescentes, quizá sea que mi mente quiere transportarme a una época en la cual no tenia tanto dolor.
Te extraño tanto Alex…
Alex… no tardes en venir por mi… por favor… aquí espero… TE AMO.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario