Al despertar he sentido como si una enorme loseta estuviera encima mio Alex, tantas emociones contenidas, tanto dolor, cuanta tristeza. He estado pensando mucho en la charla que tuve ayer con tu mamá, entiendo su posición aunque ella no entiende la mía. Ojalá me vaya antes de comenzar a desocupar los cuartos. Para los demás son solo cosas, para mi era nuestro mundo, nuestros sueños.
Me he ido temprano al Cenlex, no quería estar en casa con tanto dolor, al menos pensar en otras cosas me harían bien, eso pensé pero no fue así. La clase ha sido normal, aunque un poco divertida pero no he reído, todos a mi alrededor lo hacían incluyendo la maestra pero yo solo sonreía. Si supieran cuanto dolor tengo.
Volví a casa y le hable a tu mamá para saber como le había ido, hoy le quitarían el aparato que ayer le pusieron, pero me ha atrapado la lluvia, mientras esperaba charle un poco con Cacho, me ha dicho que se siente mejor, hasta ha bajado de peso. Sabes Alex, quisiera preguntarle tantas cosas, pero no se, son preguntas tan dolorosas, a veces solo la veo, bajo la cabeza y continuo caminando tratando de esconder mis lágrimas.
Ya estaba por llegar tu mamá y hermana, esta vez solo me he quedado un poco y cordialmente me despedí de ellas argumentando tener trabajo que hacer, llegué a casa y me derrumbé en el sillón. Que cansada me he sentido hoy.
He comido un poco más, quizá por que ayer casi no lo hice pero de nuevo me comenzó a doler el estómago. He comido más duraznos, están pequeños pero tienen un buen sabor, se que te gustaría probarlos Alex. Se que quisieras estar a mi lado, lo estás?... Te extraño tanto.
Me he hecho el té que me hacías cada vez que me dolía el estómago, he llorado mientras lo tomaba, porqué resultaron así las cosas Alex?... porque?
Alex... te amo tanto... por favor ven por mi... no me dejes más tiempo... no tardes.. TE AMO.
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