Las tunas

Hoy ha llamado tu mamá en la mañana, pero no quise contestarle el teléfono, simplemente ignore la llamada y seguí recostada, me siento tan cansada.

He comido de nuevo el famoso obispo, definitivamente no me gusta, espero que al decirle eso a mi mamá no se moleste o entristezca pero es demasiada grasa para mi.

Me he vestido y preparado para ir al Cenlex, me causa emoción ir pero a la vez mucha tristeza pues no tengo a quien contarle el como me va. Que fea situación.

Karina me ha saludado en las escaleras, ella también está prácticamente sola y al parecer no le gusta su maestra, me ha dicho que quiere cambiarse de grupo, espero pueda hacerlo. No he visto a Ivan por ningún lado.

Llegué a casa y fui a ver a tu mamá, sobre todo para que sepa que no la ignoro, después de hablar un poco con ella me dio un recipiente con tunas, las mas grandes y bonitas de la caja que la Tia Antonia le ha llevado hoy, al verlas casi me suelto a llorar pero me controlé bastante, me dice que son para ti y las ponga en un lugar especial, que si quiero comerlas deje pasar por lo menos unas 2 semanas, varias veces me ha dicho que son para ti pues te encantan las tunas.

A mi me ha dado una bolsa para tomar algunas tunas, la verdad ni ganas tenia de hacerlo pero por educación tome algunas, he dado las gracias y me vine a la casa, al hablar con mi mamá le he dicho que se las lleve, son tantas cosas que aun ahora me cuesta mucho hacer, entre ellas está el tema de las tunas.

Recordar como antes comprábamos cajas de ellas, las comíamos solas, con limón, con chile piquín, en agua, en ensalada, etc. Y ahora el solo verlas me causa una enorme tristeza. Hay Alex... tantas cosas.

Debo ponerme a estudiar, no tengo ganas pero debo hacerlo Alex, te extraño tanto.

Alex... duele mucho... ven ya por mi... no tardes... te lo suplico... ven por mi... aquí espero... TE AMO.