24 de febrero de 2020

La bolsita y medio jabón

Hoy me he reportado enferma con Vic, solo le he mandado un mensaje mencionándole que andaba mal del estómago y no quería tener un accidente en la oficina, poco tiempo después recibí su característica manita de confirmación, sin embargo, he ido a otro lado Alex, pues es un compromiso que ya tenía tomado, pero no me conviene mucho que Vic se entere.

Esta vez me he topado con menos tráfico, pero tuve momentos en donde sentí bastante feo por las subidas, y ya sabes como me pongo de nerviosa en esos casos, aunque no creo haber sido la única pues a varias personas se les apagó el coche, por suerte a mi no, y bueno llegue sin problemas, solo que tuve que dejar al coquito afuera pues había junta.

Todo bien Alex, he resuelto algunas cosas y bueno, me presentaron a otras personas, tan bien me fue que hasta me invitaron a comer, solo que quise aprovechar el tiempo y en cuanto terminé de comer me regresé a finalizar algunas cosas para así poder regresarme temprano a la casa y no toparme con el tráfico.

Ya en casa me he tomado mi tiempo para arreglar todo para mañana, dejar la cocina limpia e irme con toda calma hacia la alberca, donde me encontré con Cris quien me dijo que había olvidado su bolsita de mandado, una chiquita que usaba para poner su shampoo y demás cosas para bañarse, así que tuvo que ir comprar otra, un poco más grande que la anterior, pero mi sorpresa fue enorme cuando sacó una pequeña bolsa de color rojo que me ha regalado, wow, que detalle.

Además de eso me ofreció la mitad de su jabón zote que, según me ha estado contando, sirve mucho, sobre todo para proteger la zona intima, así que bueno, lo he tomado como un regalo de cumpleaños atrasado, que te parece?

La clase estuvo un poco pesada pues éramos muchos en el carril y la velocidad fue un poco rápido, así que todos hemos terminado muy cansados y un poco estresados por tratar de no chocar con los demás pues hay gente que nada a mitad del carril y eso dificultó un poco el avance constante de la rutina, sin embargo, fue fluida.

Ya en casa he charlado con mamá mientras regué las plantas, luego preparé algo de cenar pues llegué con bastante hambre, seguramente por el esfuerzo en la alberca.

Otro día que me has hecho tanta falta Alex, comienza ya la cuenta regresiva para el aniversario del peor día de mi vida, ojalá pueda pasarlo tranquila.

Alex… de este lado te sigo AMANDO.

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