107 Meses

Este sábado he ido con mamá al dentista, me parece que será así durante todos los sábados de este mes, afortunadamente me desperté temprano y comencé a preparar mi desayuno mientras esperaba a que llegara, por supuesto he tratado de mantenerme en calma pues este día es complicado para mí, pero bueno, ella llego poco después de las 8.30 de la mañana, pese a que le dije que lo hiciera a las 9, según ella para llegar temprano, aunque ya le dije que llegar 30 minutos antes no es llegar puntual, pero no entiende Alex.

A las 9.30 nos pusimos en camino para ver al dentista, hoy le hicieron algunas pruebas y mediciones, de ahí nos fuimos caminando hacia la basílica donde nos regalaron algunos rosarios unos chicos misioneros que andaban por ahí, creo que es parte de su religión, aunque no quise preguntar cual es, por supuesto se los quedó todos mamá.

Hemos vuelto a casa para de ahí ir al rodante para comprar mis huevos de 2 yemas y un poco de fruta pues no hay casi nada en casa, ya en casa he acomodado todo bien en el refrigerador y en el frutero, para de ahí llevar a mamá a su parada, solo que esperé bastante bajo el rayo del sol, creo que mamá se desesperó un poco pues no pasaba el transporte, pero que hacia yo en esos casos Alex?, solo esperar.

Esta vez me he ido directamente a casa de Belén, como siempre me topé con bastante gente en la parada del camión, por suerte Don Beto me ayudó, así que pude subirme en el primer camión que salió de la terminal y hasta me fui sentada, no faltó quien se quejara, no tanto por mi subida, si no porque otras personas se subieron, aunque evitaron confrontación con los demás y se fueron de pie.

La bajada fue un poco caótica, sin embargo llegue temprano a la casa de Belén, comí una rebanada de pizza, bebí un poco de agua y nos fuimos a la platica pre-bautismal, a un pueblo cercado, creo, donde lo dio una monja que de vez en cuando me sacó una sonrisa, sobre todo al momento de pedir cooperación, para no evidenciar que David no había ido con nosotras, terminé dando 50 pesos, aunque ahora que lo pienso dudo mucho que hubiéramos tenido problemas pues esa monja es alguien conocido en la familia de Belén.

Una vez regresado a casa de Belén terminé de comer un poco, aunque después fuimos a una fiesta, creo que era un bautismo, la verdad ya ni se, pero me di cuenta que en todas las fiestas siempre he comido lo mismo, bueno una ha sido la excepción, pero por lo regular siempre es arroz con nopales y barbacoa, acompañados de tortillas y tlacoyos.

Solo que, a esta hora, creo que no debí comer de más, me siento muy pesada y comienzo a repetir la grasa, espero no tener una mala noche, por suerte el baño me queda cerca, sin embargo, pese a todo, termino el día pensando tanto en ti Alex, por supuesto que todo el tiempo has estado en mi mente, me repito que solo es un día más, sin embargo, son ya 107 meses sin estar juntos.

Alex… TE SIGO AMANDO.