1 de noviembre de 2017

Las quesadillas

Pese a que ya no me duelen tanto los ligamentos de los brazos, hay días, como hoy, en los que despierto incómoda, quizá por la posición en la que duermo, quizá por las almohadas o porque me destapé e hizo mucho frío durante la madrugada, no sé bien Alex, pero al levantarme me dolía el brazo izquierdo, a veces es el otro brazo, aunque hoy fue doloroso el levantarme de la cama.

Afortunadamente el dolor fue “temporal” pues después de bañarme y desayunar ya no sentía el dolor, solo un poco de molestia en el brazo, pero nada alarmante o que me impidiera hacer algunos movimientos, inclusive pude cargar bien mi loncherita y todo Alex.

En la oficina todo estuvo tranquilo, aunque el día laboral se me ha ido lento como la cuaresma, además estuve revisando lo que sucedió con un archivo que no se actualizo como debía, al menos eso fue lo que me dijo Vic, pero desconozco lo que haya sucedido, más bien creo que alguien lo reemplazo y pues no tiene el valor para reconocer su error, pero bueno, allá ellos.

Por fortuna solo fue cuestión de actualizar una columna para que el archivo quedara actualizado, es el que usan para controlar una parte del inventario, más que nada lo que vendemos, porque lo que se usa como herramienta es un lío, lío que se corrige si estuviera programando el sistema, pero aún no logro tener inspiración del todo, además está la parte en que vamos a contratar una parte con Microsoft, solo que Vic no le ha dado mucha prioridad al tema y prefiere enfocarse en otras cosas, ni hablar.

Dependo de él para avanzar en algunas cosas, o más bien todas las que tengo por hacer, como el sistema de calidad, del cual no le damos seguimiento pues Vic quiere participar y eso me detiene, así que ahora, con lo de Microsoft, como involucra dinero pues está más renuente en avanzarle un poco más, espero que no pase de este año y comenzar el otro con una mejora tecnológica.

He pasado con tu hermana para ayudarle a poner la ofrenda, o más bien terminarla, lo único que hice fue ayudarle con el tema del cempasúchil, seguramente a ninguno de sus hijos les gusta el aroma, o quizá lo hizo para que participara un poco, que se yo, pero estuve deshojando las flores y acomodándolas, hasta pude formar un corazón con algunas flores y alrededor de este poner pétalos, ahí fue donde le puse mi ofrenda a tu mamá, esta vez le compré los mazapanes y bombones que tanto le gustaban, por ese detalle Cecilia terminó regalándome los panecitos de muerto que encargue con la vecina, que en si solo fueron 10 pesos, pero bueno.

Ya en casa charle con mamá mientras me preparaba para ir al gimnasio, de ida me he topado con bastante gente en la calle, seguramente por las fechas, y ni qué decir del regreso, mucha gente disfrazada pidiendo su calaverita, gente que ni había visto por la colonia, peor bueno.

Ahí traté de comprarte tacos, de los que solíamos comer, solo que cuando pase de regreso había tanta gente que el taquero se hacía bolas y termino casi sin carne y aun le faltaba por despachar unos 20 tacos, caminé al otro puesto, pero también había muchísima gente, así que me fui con el vecino Miguel y su esposa, donde compré unas quesadillas de pollo, eso sí Alex, con salsa verde como te gustan.

Ya en casa complete mi pequeña ofrenda poniéndote las quesadillas, pero olían tan rico que por poco les doy una mordida, hasta llegue a pensar en mandarle un mensaje al vecino para ver si podía llevarme un par a la casa, pero desistí y preferí irme a la cama, tratar de descansar y no pensar en el día, en lo que te extraño y mucho menos en llorarte.

Alex… no puedo más… ven ya por mi… duele mucho… de verdad… ven ya… TE AMO.

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