Ha sido un sábado bastante tranquilo, aunque de alguna manera me sigue pesando mucho tu ausencia, ayer por ejemplo no me sentí completa, por más que me hicieron reír siempre estabas en mi mente Alex, todo sería tan diferente.
Me he despertado tarde, desayune un poco y miré la televisión para después alistarme e irme a casa de tu mamá para llevarte flores, antes de ir he pasado a casa de Perla y le he preguntado si se nos uniría, pero ha dicho que tenía ya un compromiso, ni que decirle.
El camino ha estado muy tranquilo aunque, sinceramente, no recuerdo bien lo que hemos hablado, pero se nos ha hecho corto el camino, salvo una parte en la que encontramos tráfico y Cecilia aprovecho para comprar unas papas fritas, de esas caseras que venden en cada semáforo.
Hemos puesto las flores, cada quien en un florero, tu hermana ha llevado rosas para una de tus tías, por un momento llegue a pensar que pondría algunas en el florero de tu abuela, pero no, ha puesto las misas flores blancas que yo, en mi caso las he combinado con unas astromelias de color morado, y justo cuando tu mamá me decía que para que te ponía esas flores feas Cecilia la ha interrumpido diciendo que estaban lindas y que me dejara ponerte las que yo quisiera, por supuesto no ha sido del agrado de tu mamá pero creo que se está acostumbrando a que la callen a cada momento, ya no es como era en sus mejores momentos, donde ordenaba y todos hacían su santa voluntad.
De regreso he aprovechado para preguntarle sobre lo que haríamos el mes que entra, sabes Alex, aun me cuesta decir la fecha y hasta pronunciar ese maldito mes. Entre otras cosas Cecilia y yo estuvimos de acuerdo en hacerte una pequeña misa en la iglesia de la colonia, y llevarte flores, quizá ese día hasta pueda pedir permiso para faltar, sinceramente ni ganas de presentarme en la oficina.
Por supuesto ella piensa en hacer todo en su casa, pero Cecilia no, creo que esperaré un poco para ir a apartar la misa, como cada año soy yo quien paga eso, lo demás bueno, pero la misa y gran parte de la comida corren por mi cuenta, malditos gastos que no debería estar haciendo.
Antes de llegar a casa hemos pasado con la señora Bety, mientras Cecilia y yo comprábamos le he puesto a tu mamá un video de una niña cantándole al papa, últimamente andan maravilladas con ese señor. Casi no alcanzamos, lo bueno es que he terminado con unos ricos tacos de canasta y una coca-cola, pero ya nada sabe igual Alex, ojalá estuvieras aquí.
El resto de la tarde me lo he pasado en casa, sin ganas de salir, mañana será otro día no crees Alex?
Alex… me duele tanto tu ausencia… ojalá pronto estemos juntos… TE AMO.
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