9 de febrero de 2016

Las citas para mamá

Lo que me ha despertado hoy fue el sonido de la puerta abriéndose, por suerte recordé que era mamá entrando con la leche, siendo martes le he pedido que fuese a la leche y con eso me evito ir el próximo viernes. Así que me levanté y vestí para salir hacia el hospital. Hoy me he llevado a mamá en transporte pero como que no le ha gustado del todo, pero no hubo tanto problema Alex, el metro bus venía prácticamente vacío, solo tuvimos que caminar un poco.

Al llegar hemos ido directamente a neurología, nos ha atendido un doctor bastante curioso, desde su apellido, muy al estilo Maya, por supuesto me he acordado un poco de ti aunque al inicio me ha dado un poco de mala espina, pero poco a poco se ha relajado la situación. Al final hemos tenido que sacar muchas citas para los estudios que le han mandado a hacer, además tratamos de cambiar su cita con el doctor Cortez pero no lo encontramos y la señorita se ha negado. Ni hablar, a veces se gana otras se pierde.

De ahí a desayunar algo y tratar de cargar el celular para llamar un coche de Uber, esta vez he aceptado el dinero que mamá me dio por todos los taxis que hemos pedido para ella, pero bueno, en cualquier momento se lo estoy regresando, ya sea de una forma o de otra.

Ya en el trabajo me he dedicado más a terminar las pantallas, no me han gustado del todo pero bueno, veremos que parte les puedo mejorar ya en las pruebas. Le he preguntado a Enrique y al parecer mañana comenzaremos con eso, situación que le ha agradado a Vic pues con la llegada de Sergio lo veo mucho más presionado pero de alguna manera relajado.

Al final del día laboral he podido terminar algunas cosas, afortunadamente Sergio me ha dado un aventón al metro, así que solo he tenido que caminar un poco a casa, por supuesto he pasado a saludar a tu mamá quien me ha dicho que porque estaba enojada ayer ya que le dije a mamá que si se quedaba o no. Pero sabes Alex, no recuerdo haberlo dicho de manera grosera, más bien tenía que comer para irme a patinar más tarde, en fin.

El resto de la tarde me lo he pasado en casa, hacía mucho frío como para salir además de que aún me duele mucho el golpe del domingo, ni hablar, pero quiero aprender a patinar, eso me enseñará a no caer de espalda, todo de frente.

Termino el día mirando una película, al final no ha sido del todo mi agrado, el único chiste ha sido que la filmación duro años por lo que se observó el crecimiento de los protagonistas, de niños a adultos jóvenes.

Un día productivo Alex, pero hubiera sido genial de estar juntos, no sabes cuánto te echo de menos.

Alex… ven ya por mi… TE AMO.

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