22 de noviembre de 2012

Por Bellas Artes

Como cada jueves me salí de casa temprano, hoy veré de nuevo al chico de los libros, supuestamente a las 10 de la mañana, así que me senté afuera del palacio de Bellas Artes mirando a la gente pasar, tenía ganas de charlar con algún extranjero despistado y practicar un poco mi inglés, pero creo que ninguno se despertó temprano.

Hacía frío y había poca gente en la calle, antes de que dieran las 10 de la mañana recibí un mensaje del chico, me cambiaba la hora para las 2 de la tarde, bueno pues accedí a verlo.

Bastantes horas tenía para perder, me encamine hacia las librerías de viejo, esta vez miré con más atención los libros, encontré dos que me interesaron Alex, ambos en ingles, espero poder leerlos antes de que me vaya contigo.

Como aún tenía tiempo pasé al comedor Vicentino, tenía suficiente tiempo como para ayudar un poco, mientras esperaba a que fuera la hora charle con algunos chicos que suelen ir, Adriana y dos chicos más que no recuerdo su nombre, pero muy agradables, a Adriana su mamá la corrió de su casa en repetidas ocasiones y la opero para no tener bebes, tiene 34 años pero se ve mucho más grande que yo.

Otro chico con unos lindos ojos, proveniente de Veracruz y uno más que amablemente me ofreció de comer unos tamales fríos. Hasta ellos se dan cuenta de la tristeza en mis ojos, uno de ellos me pregunto que si me pasaba algo pues me veía muy triste, solo les conté que tu ya no estabas a mi lado y por eso me sentía triste, no dijeron mucho, bajaron la mirada y comenzamos a hablar de otro tema.

Ayudé un poco a servir la comida, repartí los platos y al final me fui pues comenzaba la limpieza con cloro, en ese aspecto no ayude pues no quiero terminar con las manos llenas de granitos Alex.

Y volví a casa con el tiempo suficiente para ir al Cenlex, tomar clases y volver a casa, sobrevivir la tarde y esperar a que sea hoy el día que vengas por mi.

Alex... ven ya por mi... te lo suplico... no tardes... TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario