23 de noviembre de 2012

Conociendo a Lee

Como todos los días hoy me ha costado levantarme de la cama, sin embargo hice mi mayor esfuerzo y salí de la cama, escuche constantemente que tu mamá hablaba con su trabajador, al parecer se encuentra molesta con el, al menos eso me pareció el tono que utilizó tu mamá, no quise poner mucha atención y simplemente fui a la sala y prendí la televisión.

Comí un poco antes de irme al Cenlex, ni ganas tengo de salir de casa, hace frío, al menos cuando estas bajo la sombra se siente el aire frío Alex, seguramente este clima no te gustaría, siempre te gusto mas el sol.

Volví sin ganas de nada, prácticamente me escabullí dentro de la casa, me serví de nuevo comida pero solo estuve comiendo pequeños bocados, me ha servido para cenar.

De nuevo la televisión es mi compañera Alex, al menos hace ruido cuando necesito sentirme "acompañada", no se cuantas veces he visto la serie completa de Friends pero sigo mirándola, creo que comienzo a aprenderme los diálogos, pero solo veo los capítulos que pasan por la televisión aun y cuando me compraste toda la serie en DVD, aun no puedo poner ninguna película, mucho menos abrir un estuche, todo sigue tal cual lo dejaste y organizaste, todo sigue igual Alex, hasta yo.

Por la noche me conecte a una pagina para practicar mi ingles, he conocido a algunas personas interesantes, otras sinceramente no, uno de ellos fue un chico coreano Alex, por la noche salí a conocerlo, pensando que con eso me sentiría un poco mejor.

No se que me paso, me quede helada y no pude decir muchas cosas, prácticamente mi inglés desapareció y me quede en blanco, aunque también me costo trabajo entenderlo, le mostré un poco de la ciudad, creo que ambos teníamos miedo el de mi y por supuesto yo de el, constantemente pensaba en las técnicas que aprendí con el sensei Manuel, por lo menos sabría como zafarme y salir corriendo. Tantas cosas se me vinieron a la mente.

Afortunadamente no paso nada y después de 1 hora pude volver a casa, seguramente fui una tremenda desepción para Lee, chico alto con los rasgos orientales muy marcados, todo vestido de negro y con un rico aroma, pero finalmente nos despedimos con un abrazo y quizá nos veamos cuando regrese a la ciudad, seguramente eso no pasará, volví a la casa a dormir Alex, pensando que esta es una de las tantas cosas que no deberían estar pasando si tu estuvieras a mi lado.

Alex... no me gusta estar sin ti... ven por mi... TE AMO.

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