1 de septiembre de 2011

Triste ???

Aunque me dormí a las 4 de la mañana no pude evitar ganarle al despertador de nuevo Alex, eran las 8.15 cuando ya estaba despierta aunque me quede 15 minutos más en la cama. Al sonar el despertador me levante de la cama, me vestí y deje todo listo para que viniera la ratita Alex.

Camine hacia la compañía de teléfonos, creo que he tomado la ruta más larga pues a medio camino ya estaba sudando y mis pies comenzaban a reclamar el caminar. Afortunadamente casi no había gente y pude pagar en un lapso de 15 minutos, incluyendo fila y la señora que no se iba de la caja. Después de ahí caminé al metro y a la línea correcta, recordé las tantas veces que me dijiste que era más corto hacerlo por la parte de afuera, pero pensé que estaría un poco más segura por dentro.

Ya en la línea correcta me dirigí al punto de reunión, la iglesia afuera de la estación Guerrero, no sé realmente el motivo pero no estaba completamente abierta, espere por unos 10 minutos y llego el amigo de Edgar, un señor bastante correcto pero aun así me dio desconfianza.

Ya en las oficinas entregue los papeles y espere a que me llamaran, me ha tocado una señora al lado que se movía como chinicuil Alex y luego se sentó al otro lado una persona bastante obesa y oliendo un poco extraño. Pasaron casi 2 horas cuando por fin me llamaron y seleccione la aseguradora que había quedado con Edgar, la verdad me sentí incomoda con su amigo por las preguntas que me hizo, se que fue para hacer platica pero lo único que consiguió fue hacerme sentir bastante triste, llego el momento en el que pensaba que no estaba ahí y todo comenzó a moverse bastante extraño, era como si estuviera pero no. Al final me han dicho que vaya de nuevo a fin de mes para recoger la resolución final, tramites puros tramites Alex que sigo pensando no debería de estar haciendo.

Decidí ir al comedor vicentino Alex, por la única razón de perder el tiempo hasta que la ratita se fuera, llegue casi a medio día y aun no llegaba la comida, me senté en uno de los banquillos y una señora, del comedor, me pregunto qué me pasaba, me vio bastante triste, lo hizo en repetidas ocasiones y lo único que pude hacer fue soltarme a llorar, no sé realmente en qué estado me vio pero se sentó a mi lado y tomo mis manos, hizo algunas hipótesis pero por supuesto ninguna atinada Alex.

Al final de la jornada y justo cuando comenzaban a limpiar con cloro me despedí cortésmente y me salí del lugar, nuevamente camine por las calles y tome un camión para la casa Alex aunque en la Basílica tome el que me llevaría directo al supermercado. Compre algunas cosas entre ellas un litro de Helado para tu mamá, por supuesto ha sido de Coco, como siempre me pedias. Al entregárselo me ha dicho que este fin de semana no irán al panteón pues tiene algunas cosas que hacer, algo que sencillamente a mi no me causa problema pues vayan o no vayan yo iré a llevar flores.

Llame a mi mamá para avisarle que seguramente no va a ser necesario que venga este fin de semana a casa y que la comida ya preparada para mí la guarde en el congelador para la próxima semana. Creo que no le gusto mucho pero creo que es el comienzo de que venga cada 15 días.

Por la noche paso el camión de la basura y fui a tirarla, sinceramente no estaba muy convencida pero vi a varios vecinos llevar la suya, así que fui por la bolsa y la tire, de regreso vi que estaba prendida la luz de la oficina, algo extraño pues la ratita no suele dejar prendidas las luces de la casa, aunque sirvió para recordar buenos tiempos. Tiempos en donde trabajábamos hasta noche en la oficina, revisando cosas o algunas veces solo viendo televisión. Como extraño esos tiempos Alex, como te extraño.

Alex, por favor te lo suplico, ven ya por mi… no me gusta estar así… duele mucho… por favor no tardes… aquí espero… ven ya… TE AMO.

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