La torta de salchicha

Hoy de nuevo me he despertado temprano, esta vez he desayunado un poco, me alisté y pasé por el ahijado, quien amablemente me dijo que me acompañaba hoy a mi cita con el alergólogo, al llegar se sorprendió que fuera en una Voca, y más cuando entramos y pudo ver un poco las instalaciones, con lo que reforzó su deseo de cambiarse de escuela, aunque sigue pensando en irse a una de la Unam Alex, pero bueno, al menos ya vio un poco lo que es una escuela del Poli.

Hemos charlado un poco de las escuelas de regreso, me acompañó a guardar al coquito, y luego me preguntó si lo acompañaba por una torta, ahí donde solíamos comprarlas nosotros, a un costado del banco, accedí a ir con el en retribución por las veces que me acompaña, estando ahí me dijo que si no quería una torta, le mencioné que no llevaba dinero y de la nada me dijo: “Yo te invito manina”, lo que me sorprendió bastante ya que nunca me había comprado algo.

De hecho, sentí un poco feo cuando Cachito comentó, en una reunión, que el ahijado le había invitado un café de Starbucks, y a mí nunca me había invitado ni un chicle, siempre había sido yo quien le pagaba todo y ahora, con lo de su beca, por fin pude cortar una flor de su jardín, por supuesto he pedido la misma que él, de salchicha, pero sin picante, hasta me di el lujo de hacer el mismo comentario que solíamos hacer juntos, te acuerdas?

Mientras estuve esperando que saliera de su casa para ir por las tortas, he cortado un poco de las hojas de su guayabo pues recordé que mamá me dijo que quería, según son buenas para el estómago, por supuesto he cortado las más bonitas y tiernas, ya en casa le mencioné a mamá eso y me agradeció pues hace tiempo que ha querido salir a cortar un poco, pero con lo de la pandemia casi no ha salido de casa.

Ya en casa he comido la mitad de la torta pues no tenía tanta hambre, levanté la casa, corte un poco las plantas y, usando la cubeta que estaba abajo donde puse las hojas que barrí de afuera, pues terminé con la cubeta bien llena de yerbas, ya mañana que pase la basura la tiro, por lo pronto he podido dejar las plantas bastante presentables y sin tantas hojas secas.

Mamá me ha dicho que debería poner plantas nuevas pues me quedé sin ruda, romero y albahaca pues ya estaban bastantes feas y algunas no les gustó que las podara y comenzaron a secarse, pero no se Alex, quizá sea bueno ya no tener plantas,

Termino el día como siempre, pensando mucho en ti y en la falta que me haces.

Alex… TE AMO.