La alarma del celular comenzó a sonar a las 7 de la mañana,
para entonces ya estaba más despierta que nada, así que comencé a doblar las
cobijas y dejar medio acomodada la cama, me vestí y preparé para ir a comprar
la leche, esta vez no he volteado a ver el pan, pese a que llevaba dinero suficiente,
en casa metí las bolsas al refrigerador y me fui al centro comercial.
Vague un poco por los pasillos pero no encontré nada que me
llamara la atención, aunque descubrí una madriguera pero nada que llamara mi
atención, de ahí a la sección de cuidado personal, encontré los tratamientos a
30 pesos, de 3 solo tomé 2, y vi los shampoo que a mamá le gustan, esos que
traté de encontrar en otras sucursales y nada, pues ahí estaban de nuevo Alex,
tomé 4 botellas, dejando 3 y me fui, al poco rato regresé y vi que una viejita
estaba viendo shampoo de esa marca, pero los dejó por estar caros, alrededor de
80 pesos como mínimo, así que me acerque y le mostré uno que estaba en 30
pesos, los mismos que llevaba ya en mi bolsita, al final se animó y tomó los 3
que quedaban, así que hice una buena obra.
Me vine porque no encontré más, dejé las cosas y fui al
rodante para comprar duraznos, creo llegue un poco tarde pues me dieron a
escoger unos que estaban un poco más chicos que los mostrados para vender, pero
esos estaban en 40 pesos y los que me dejaron escoger en 30, aunque creo que le
costaron lo mismo al vendedor, solo escogieron los más grandes, pero bueno,
como dice mamá: “muchas veces los chicos saben mejor”, al pagar la señora solo
me estaba cobrando un kilo, le hice ver el error y me vine, así que puedo
decirte que es mi segunda obra buena del día Alex.
Por ahí de las 2 de la tarde me animé para ir de nuevo al
centro comercial pues vi que el azúcar y el chocolate abuelita estaban en
oferta, solo he ido de entrada por salida, pensé en traerme más chocolate, pero
creo, estuvo bien así.
Más tarde lo he confirmado con mamá cuando hablé con ella,
me ha dicho que estuvo bien, además de que ella aún tiene una latita en su
alacena, hablamos de varias cosas Alex, sobre todo de que su vecina no deja de
hablar de mí, al parecer también me quiere de herencia, puedes creerlo?
Para cenar me he preparado dos sándwiches, les puse un poco
de pico de gallo que me quedo de los tacos del domingo, tremenda enchilada me
he metido, pero es que se ve tan rico, ni hablar, a usar menos.
Y bueno, se termina un día más Alex… me voy a dormir con la esperanza de soñarte… TE AMO.
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