4 de febrero de 2019

La sal para mamá

Por fin un día feriado Alex, creo que es el primero del año, bueno después del maratón Guadalupe – Reyes, pero bueno, he aprovechado que es feriado para así poder levantarme tarde ya que me fui a la cama bastante tarde, entre que llegue a casa, lave trastes y vi un poco de televisión me he ido a la cama tarde, además de que me costó trabajo conciliar el sueño por tantas cosas en mente, sobre todo un poco de calor, no sé, pero bueno.

Puse la lavadora y me di a la tardea de tenderla pues hacia un buen sol, solo que algunas prendas se me mancharon por el viejo suavizante, terminé poniendo una lavadora de más para enjuagarlas y dejarlas todas listas y sin manchas, por suerte el aroma no se les fue del todo, pero bueno, trataré de tener más cuidado con ese suavzante, quizá solo deba usarlo para las cobijas, aunque lo mejor sería deshacerme de el, solo que eso ultimo no creo hacer pues ese aroma me gusta y ya no lo van a sacar, pero bueno.

Después de tender y subir agua, he ido a la tienda, más que nada para comprar un encargo de mamá pues su hermana le dijo que vendían sal de Manzanillo, y ahí me tienes buscándola entre los anaqueles, cuando por fin di con ella he agarrado dos bolsas y me vine a casa, ni te cuento lo que se me antojaron las galletas de nata, que están prohibidas por recomendación de la nutrióloga, pero esta vez quería no hacerle caso, tuve suerte de que al buscarlas no las encontré, pero vi otras que también se me antojaron, aunque esas si pude evitarlas, sin embargo sigo con el antojo de las galletas con nata, que mal.

He vuelto a casa sin nada más por hacer, más que esperar a que se secara la ropa para doblarla, regar las plantas mientras hablaba con mamá de la sal, hasta le comenté de la sal que tenía en casa y que, según yo estaba ya caducada, pero ella me dijo que se la llevara pues la sal no caduca, cosa que no sabía y ya no quise investigar un poco más, así que el próximo sábado le llevo las 3 bolsas de sal y las últimas macetas que me quedan en casa, macetas que compramos juntos Alex y me duele deshacerme de ellas, pero no me queda de otra.

Así que termino el día sola, triste y pensando tanto en ti Alex.

Alex… ven ya por mi… TE AMO.

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