Entre abogados

Hoy no he ido a la oficina Alex, al menos no temprano pues debo estar en los juzgados para firmar un documento para agilizar el proceso que aun tenemos pendiente, vi a Luis frente a las fuentes y me explico de nuevo lo que había pasado con los abogados de tu mamá.

Subimos a las oficinas, pidió el expediente y esperamos a que llegaran, para nuestra sorpresa ya estaban ahí y se les explico el procedimiento, por supuesto me he retirado para no meter la pata y dejar que la charla sea entre abogados, no tardaron mucho y al final quedaron de que nos tendríamos que poner de acuerdo su mamá y yo para definir todo, cosa que no me hizo gracia.

Pero bueno Alex, al menos se han dado cuenta que no hay nada malo con respecto a lo que estoy haciendo y tu mamá podrá estar tranquila, como le he dicho en repetidas ocasiones no pretendo quedarme con nada de ella, lo que yo más quería eres tú y ya no estás de este lado Alex.

Volví al trabajo, más triste que nada, pero solo me he quedado un poco pues ya casi era hora para irme al Cenlex, la clase se me hizo muy larga, no pude dejar de pensar en lo que había pasado y las consecuencias que eso tendría, sigo pensando que en cualquier momento tu mamá me pedirá que me vaya, si no es ella seguro son tus sobrinos.

Hay Alex, se que te había prometido ya no pensar en eso, pero como siempre te he dicho, cada vez que creo avanzar en algo siempre existe cualquier cosa que me hace retroceder el doble de lo avanzado, y hoy no es la excepción.

Ojalá pudieras estar aquí Alex, aunque seguramente me dirías que es una casa y que lo más importante esta dentro de mí, pero son tantos recuerdos, tantas ilusiones, que me cuesta mucho deshacerme de ellos.

Porque tienen que ser las cosas así? Alex, más que nunca te necesito tanto, por favor ayúdame, entre esto y que quieren que firme un contrato me tienen contra la pared, porque me tratan así?

Esto no debería de pasar, no debería de pasarme Alex, ayúdame, ya no se que más hacer. Le he medio contado a mamá lo que sucede, tratando de aparentar tranquilidad y que entiendo la postura de tu mamá, pero aquí entre nos no lo entiendo Alex, yo no le he dado ningún motivo para desconfiar, pero seguramente lo que hizo Carmen me va a perseguir por el resto de mis días, tu sabes perfectamente que no somos iguales, ni siquiera parecidas, porque tengo que cargar con esta cruz si la que ya tengo pesa demasiado? Porque Alex?

Alex… ven ya por mi… duele mucho estar así, no puedo más… ayúdame… ya no quiero estar aquí. ven por mi… TE AMO.