15 de febrero de 2014

35 Meses

Maldito día Alex, como odio estos días, me recuerdan lo sola que me encuentro, por más que he tratado de distraerme nada ha funcionado. Ni siquiera el hecho de que después de ir por la leche trate de dormirme de nuevo. Como siempre tome las dos bolsas y volví a casa, metí una al congelador y la otra la he puesto abajo, después, antes de comenzar a llorar, me he ido a la cama.

He tratado de ver un poco los juegos olímpicos, pero las lagrimas comenzaron a brotar, a veces me resulta tan difícil pensar que las personas te están olvidando poco a poco, yo no puedo hacerlo Alex, no puedo y no quiero.

Afortunadamente me quede dormida y he despertado a la una de la tarde, escuche como el machetero estaba haciendo algunas cosas, como la voz de tu mamá daba algunas indicaciones y prendí la televisión de nuevo.

Hoy no he querido ir antes a rezarte, me parece absurdo ir si de todas maneras iré más tarde con tu mamá, lo mismo pasó el sábado pasado.

Y a las tres de la tarde he salido de casa he ido con tu mamá para irnos a ponerte flores, esta vez llevo unas amarillas y otras moradas, un color bastante vistoso y sé que te van a gustar Alex, aunque sé muy bien que no te gustaría que fuéramos cada fin de semana a llevarte flores.

Casi no hemos hablado en el camino, todas íbamos pensando en otras cosas y cuando llegamos le han pedido al hermano del güero que tratara de nivelar la sección de la “abuelita” pues difícilmente pueden poner las sillas ahí, ha sido un gran abuso el que hizo este hombre pues medio nivelo la tierra y puso agua, al final les ha cobrado unos 70 pesos, de los cuales he prestado 50.

Ese ha sido el tema de regreso, por supuesto hemos puesto las flores en los demás jarrones y nos venimos a casa, el hablar de cómo la gente es abusiva y como para algunas personas les es fácil olvidar, siempre andan recordando una frase que pusieron en los arreglos de la abuelita: No te olvidaremos.

Pero han pasado varios días y semanas y nadie ha vuelto a ese lugar, ni siquiera para ponerle una flor, nada. Será que eso es lo que me va a pasar cuando me vaya?

Sigo pensando en que ya es tiempo de irme, solo quiero esperar a que operen a mamá para irme Alex, no me gusta estar sin ti.

El resto de la tarde lo he pasado llorando, nadie se ha dado cuenta, al menos puedo hacer eso Alex, llorar desconsoladamente hasta tratar de quedarme dormida.

Es tan fácil decir que han pasado 35 meses, para la gente será fácil, para mí no lo es, no lo es Alex, tanto tiempo de estar aquí, esperando a que vengas por mí, cuando vienes?

Casi no he comido, casi no he salido, casi… ya no vivo.

Alex… ven por mi… te lo ruego… no tardes… TE AMO.

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