Un día difícil Alex, después de tantas emociones encontradas, tantos porqués, tantas preguntas, tantos silencios. No he tenido fuerzas para levantarme de la cama, me la he pasado dormida, al menos con eso aseguro no pensar en nada Alex.
Al menos, en los sueños tengo la esperanza de volverte a ver, sigo estando en una realidad que nada me agrada, si al menos estuvieras a mi lado Alex, en esta realidad, no en otras, no me sirves en otras realidades Alex.
El solo pensar en ese niño, en lo que debimos haber recorrido, la mirada de su padre me estremeció tanto, aun ahora sigo pensando en él.
Tantas preguntas sin respuestas me confunden, tantas cosas Alex.
Porque no estás a mi lado?
Me he pasado toda la noche y gran parte de la madrugada llorando, no es justo Alex… no lo es… no lo es.
No he salido para nada de la casa, he escuchado como tu mamá me llamaba pero hice caso omiso, como salir con los ojos rojos e hinchados y sin ganas de darle explicaciones.
Para no tener ningún problema le he llamado, afortunadamente me contesto Cecilia y le dije que ya había llegado del trabajo, pero tenía muchas cosas que hacer, que por favor le dijera a tu mamá que ya me encontraba en la casa.
Solo escuche un sonido de fastidio y al final me dijo que estaba bien, colgó el teléfono, Me quede un rato con el auricular en la mano, pensando que era lo mejor, no quiero estar dando explicaciones luego.
Hay Alex… que día tan feo.
Alex… ven ya por mi… no tardes… te lo suplico… duele mucho… TE AMO.
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