4 de julio de 2013

Alcohol del 96

Jueves, me ha costado trabajo levantarme temprano pero no tenía ganas de ver a la señora de la limpieza así que tome mis cosas y salí de casa antes de que ella llegara, solo llevaba en las manos un libro Alex, uno de la colección que compre en días pasados con mamá.

No tenía nada planeado, solo camine y camine. Llegue al local cerca de la Basílica donde venden pastes, pedí uno y me senté en una de las mesas que están atrás, solo quería perder el tiempo, lentamente comí el paste, aunque extraño pero me resulto bastante grasoso y falto de sabor, pero hice todo lo posible porque durara el tiempo suficiente.

La gente comenzó a llegar al local, así que mi idea de perder el tiempo de forma tranquila comenzaba a desaparecer, trate de pagar el paste pero no tenían cambio, por lo que fui a una tienda cerca y compre un café, volví y pague el paste.

Cuando mire el reloj aun faltaba bastante tiempo para que la señora se fuera de la casa, camine hacia la Basílica y me senté en la entrada, vi como la gente entraba, como algunos turistas tomaban fotos y unos pseudo fieles se hincaban a pocos metros para cumplir su manda, casi me suelto a reír por esa estupidez Alex, vaya católicos resultan ser, mas hipócritas que yo sentada en ese lugar.

Al menos yo solo estaba ahí para pasar el tiempo, sigo sin entender muchas cosas Alex, sobre todo enojada con “las fuerzas superiores” o lo que quiera que puedan llegar a ser. No puedo imaginar que una “madre” permita que su “hija” sufra de la forma que yo lo hago, si cuando veo los ojos de mamá siento el dolor que ella tiene por verme sufrir, se que ella haría hasta lo imposible por ayudarme, pero nadie puede Alex.

Mientras caminaba de regreso a casa pase por una zapatería y vi un par que llamaron mi atención, entre pero para mi suerte, como siempre sucede, no había de mi numero pero pude entablar una charla ligera con un par de extranjeros, creo que mi ingles está mejorando de a poco, aunque sé muy bien que debo concentrarme, estudiar mas y sobre todo practicarlo.

Pase por la tienda donde me llevaste a comprar alcohol una vez, bueno más bien te acompañe a comprarlo para tu mamá, me detuve y compre un poco para llevarle a mamá, y volví a casa con una bolsa y dos botellas de alcohol.

Para mi sorpresa no había venido la señora, un desperdicio el haberme levantado temprano, eso fue lo que pensé, le llame por teléfono para saber si no iba a venir pero me dijo que ya estaba en camino, cosas de su trabajo y los horarios. En fin, afortunadamente vino a casa Alex e hizo el aseo mientras me quede en la parte de arriba perdiendo el tiempo, nuevamente.

Cuando subió le he agradecido mucho el haber encontrado mi dije, ella ha sido la persona que me hizo brincar de “alegría” cuando me dejo en un post-it el dije que pensé había perdido. Llore mucho cuando eso paso Alex, afortunadamente pude recuperarlo.

No tenía hambre, pero comí un poco y por la tarde fui a ver a tu mamá, no hemos hablado de nada especial.

Te extraño tanto Alex.

Ven ya por mi… por favor… te lo suplico… no tardes… TE AMO.

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