8 de julio de 2013

Durmiendo hasta tarde

Un día más en el que me es imposible salir de la casa, ni se diga de la cama, creo que mi mente está sufriendo tanto que prefiere estar dormida, no recuerdo exactamente a qué hora he despertado, pero sé que es tarde, al menos es lo que pude deducir del sol que entraba por las ventanas.

No he escuchado mucho ruido, afortunadamente no he visto al trabajador de tu mamá y al asomarme pude ver que ni siquiera la camioneta está, aproveche para darme un buen baño, pero ni eso ha hecho que me sienta mejor.

Ayer me hicieron tanta falta tus mimos, al menos ya casi no voy al baño, de nuevo estreñida como siempre.

Veo los “hijos” constantemente, me es tan difícil jugar con ellos, ya no tienen esas vocecitas que solías hacerles Alex, ya nada a mi alrededor tiene o vale la pena.

Por la tarde he llamado a mi mamá, le he dicho que estoy mejor y he comido lo suficiente, pero tú y yo sabemos que eso no es cierto, al menos no el de estar mejor.

Alrededor de las 6 de la tarde pase a ver a tu mamá, le he hecho creer que regresaba de trabajar, si supieran la verdad, seguro que no me escapaba de un buen sermón.

Creo que tomaré una pastilla para dormir, estoy cansada pero las horas que he dormido seguro no me dejaran hacerlo temprano.

De nuevo la plática de mamá gira en torno a su madre, me dijo que está enferma y que quizá la internen, pero ni ella o yo estamos preocupadas, siempre es lo mismo, creo que ha estado en el hospital más que yo, al menos yo si lo necesitaba, ella… no. De todas maneras, cualquier cosa la mandaré a verla en avión, espero lo soporte sola pues no pretendo ir con ella de ninguna manera, no tolero estar cerca del aeropuerto. Tantos recuerdos.

Alex… te extraño tanto… no tienes idea cuanto… por favor… te lo ruego… ven por mí… TE AMO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario